lunes, 29 de noviembre de 2010

Los jóvenes, población y economía

LOS JÓVENES, POBLACIÓN Y ECONOMÍA
Jesús Castillo More (*)
Según el reloj de la población mundial, cada minuto nacen 264 personas y mueren 107, con lo que el crecimiento natural de la población mundial es de 157 personas por minuto.
China, con 1,347 millones, e India con 1,184, son los dos países más poblados de la tierra y las proyecciones indican que en el año 2025 India, con 1,807.9 millones tendrá mayor población que China, que para ese entonces tendrá 1,424.2 millones. La población mundial pasará en este período, de 6,866.9 a 9,539 millones de habitantes.
La población mundial se envejece y la proporción de jóvenes es cada vez menor debido a la disminución en la tasa de natalidad y al aumento en la esperanza de vida.
En el Perú, los ocho millones y medio de jóvenes son el 30% de la población, y en 2025 aunque en términos absolutos aumentarán a ocho millones novecientos mil, en términos porcentuales caerán a 24%.
Estas tendencias afectan directamente a los jóvenes, que tradicionalmente han cargado con la deuda externa contraída para que sea pagada por las futuras generaciones y con los sistemas de seguridad social desfinanciados. Esto explica las modificaciones legales para aumentar la edad de jubilación en los países europeos, la eliminación de la cédula viva en el Perú, el diseño de nuevos sistemas privados, pues el sistema estatal se hace cada vez más insostenible.
Por su propia naturaleza, los jóvenes son fervientes partidarios de la justicia social y desean soluciones rápidas a los problemas de pobreza, desigualdad y desempleo. Sin embargo, este noble propósito muchas veces es fuente de aprovechamiento para que esta efervescencia juvenil sea desviada hacia fines de política partidaria que se concentran en influir exclusivamente en la formación ideológica de los jóvenes, sin darles la oportunidad de adoptar decisiones propias, responsables, fruto de su análisis razonado de la solución más eficaz para los problemas sociales, dada la lógica del funcionamiento de los sistemas económicos y sus implicancias políticas sobre la democracia y libertad.
Es necesario entonces que los jóvenes estén adecuadamente preparados para adoptar decisiones responsables en la elección de las autoridades locales, regionales y nacionales; formación personal para que, ampliando su horizonte de decisiones, sepan elegir su futuro empleo y profesión con madurez y participar activamente en los programas que requieren su valioso apoyo en los programas sociales.
Los nuevos desafíos que enfrentan los jóvenes: avance tecnológico, y las tecnologías de la información y la comunicación, el crecimiento económico y la globalización, que son fenómenos contemporáneos que afectan sustancialmente la productividad del trabajo, al empleo y las remuneraciones a nivel interno y externo; la carga cada vez más pesada de los programas sociales; falta de oportunidades, las madres soleteras; enfermedades infecciosas como el sida, desempleo, drogadicción y violencia juvenil, hacen indispensable que las familias, la escuela, la universidad, los gobiernos locales, regionales y nacional, los candidatos a gobernantes, incluyan obligatoriamente programas que ayuden a los jóvenes a enfrentarlos: eliminación de la desnutrición infantil, mayores oportunidades de educación de calidad y empleo, actividades deportivas, programas sociales con participación juvenil, organizaciones de apoyo a la solución de los problemas de los jóvenes, donde ellos participen como directamente interesados.
(*) Profesor de la Universidad de Lambayeque